SEGURIDAD ELECTRÓNICA





La seguridad y su correcta implantación ha supuesto uno de los principales problemas de la humanidad desde hace años. La seguridad electrónica ha surgido a consecuencia del auge de las redes de comunicación, de Internet y de las redes sociales, complementando a la seguridad física. Las dos son igual de importantes, pues gracias a la tecnología podemos mejorar su correcta ejecución.

La seguridad electrónica se define como la aplicación de las Tecnologías de la Información y de la Comunicación (TIC) a las actuaciones de la seguridad física.

En cuanto a la seguridad física, se ocupa de temas relacionados con la prevención de la delincuencia hacia personas, instituciones y empresas, situaciones de emergencia ante crisis, catástrofes o accidentes tanto naturales como humanos, la seguridad ciudadana o protección de colectivos en situaciones de riesgo.

En cuanto a la seguridad online, más centrada en el mundo virtual, también se ocupa de los campos de actuación de la seguridad física, especialmente en ámbitos de conectividad y videovigilancia, centros de atención y coordinación de emergencias, centros penitenciarios, pulseras telemáticas, y también áreas relacionadas con las empresas u organizaciones.

Los Circuitos Cerrados de Televisión (CCTV), controles de acceso y presencia, sistemas de intrusión, control de activos y control de acceso gestionado, centros de control de alarmas, etc., son tecnologías de ultima generación empleadas por las empresas e instituciones de seguridad electrónica. La protección contra incendios también es esencial, cuya finalidad es evitar pérdidas y daños causados por el fuego, impidiendo su propagación y puesta en peligro de la vida de personas y bienes. La señalización, el alumbrado de emergencia o megafonía de emergencia y evacuación, la protección activa y la protección pasiva son empleadas por las TIC. En materia de incendios, la protección activa se refiere a la ejecución de movimientos para controlar el fuego, como por ejemplo, el empleo de una manguera. Por otro lado, la protección pasiva se refiere a los obstáculos que se interponen para evitar la propagación del fuego.

La videovigilancia es muy importante en lugares donde frecuentan una gran número de personas, como en centros comerciales, polígonos, urbanizaciones, aeropuertos, parques...Se utilizan cámaras de alta definición y se conectan con las redes existentes vía protocolos IP. Comparan objetos de forma automática por su tamaño, color, velocidad de movimiento, y se programas desencadenando acciones en función de imágenes, coordinando varias cámaras y siguiendo todos los movimientos de una persona. Los centros penitenciaros son lugares donde las cámaras de seguridad desempeñan una importante labor. Se utilizan cámara de CCTV, con posibilidades de grabación y análisis de vídeo, las cámaras térmicas de 360 grados, equipos de grabación de audio, como telefonía fija, comunicaciones por radio y móviles, los sistemas de detección, inhibición y localización de teléfonos móviles, los sistemas de detección primetral o el software de gestión de la información sobre seguridad física.

Las situaciones de emergencia, como incendios, nevadas, inundaciones, terremotos, ataques terroristas...hacen imprescindible el uso de las nuevas tecnologías para erradicar los efectos perjudiciales de estos fenómenos e impedir que aparezcan, minimizando los daños causados por las catástrofes.

Un centro de atención o coordinación de emergencias es un sistema para recibir y canalizar las llamadas de emergencia de los ciudadanos, las 24 horas del día durante 365 días del año. Una vez que los operadores reciben la llamada, solicitan información sobre los datos de la persona, del incidente, permitiendo así su localización y el geoposicionamiento de la persona en un mapa. La incidencia se clasifica, tipificando su gravedad y pasan el aviso de forma coordinada a los distintos cuerpos y fuerzas de seguridad para atenderla. De esta manera, las emergencias se gestionan de forma eficaz gracias a la tecnología empleada y a los procesos automatizados.

Las TIC también se emplean en casos de violencia de género. Se trata del uso de pulseras GPS (Global Positioning System, o Sistema de Posicionamiento Global). Se trata de un dispositivo con GPS que se coloca al agresor en la muñeca o el tobillo y que está conectado con otro dispositivo gemelo que se le entrega a la víctima. Ambos GPS están conectados entre sí y cuando el agresor se sitúa por debajo de la distancia de separación fijada, emite un pitido que indica que ambos se encuentran más cerca de lo permitido.

Las tecnologías de información aún están en pleno desarrollo. Se prevee en un futuro establecer sistemas de videovigilancia de IP, reconocimiento biometrico, software de análisis inteligente de imágenes, sistemas de lectura de matrículas de vehículos,etc.

El Internet de las Cosas también va a ocupar un lugar importante dentro de la seguridad electrónica. Hace uso de la capacidad para combinar datos con personas, procesos y objetos. Se utilizan sensores, redes avanzadas de comunicaciones y procesos analíticos basados en el big data, que pondrán marcha sistemas, aplicaciones y soluciones para mejorar la efectividad de la seguridad de las personas y de las organizaciones públicas y privadas, respondiendo a tiempo real con la intervención de los cuerpos competentes en cada caso.

En cuanto a la seguridad en los hogares, es de destacar el Estudio sobre la Ciberseguridad y Confianza en los hogares españoles, del Observatorio Nacional de Telecomunicaciones y de la Sociedad de la Información (ONTSI), correspondiente al primer semestre de 2017, y que recoge información relativa al estado de la ciberseguridad en los hogares, analizando la adopción de medidas de seguridad y el nivel de incidencia de situaciones que pueden constituir riesgos de seguridad, así como el grado de confianza que la población tiene en internet. Se hizo un cuestionario online a 3665 hogares y por otro lado, el Software Pinkerton instalado en 2743 PC's y 922 dispositivos Android, tanto smartphones como tablets, de forma que se puede constrastar la información declarada de los cuestionarios con los datos reales recogidos por el software. Las conclusiones del primer semestre de 2017 son las siguientes:

-La ciberconfianza alcanza un valor mínimo histórico en el primer semestre de 2017: el 39,9% de los usuarios tiene mucha o bastante confianza en Internet. 
-Dos tercios (66,6%) de los internautas consideran su equipo razonablemente protegido y la valoración de Internet como cada día más seguro se mantiene en el 42,6% de las declaraciones.
-A pesar de las infecciones de malware que representan el riesgo de Internet más valorado por los usuarios (81,9%), dichas infecciones siguen ocurriendo y, pasando desapercibidas. El 53,2% de los ordenadores españoles y el 23,6% de dispositivos Android presentan malware sin que usuarios se percatasen (el total de las infecciones es del 65,6% y el 26,6%, respectivamente).

En definitiva, la seguridad electrónica ha de tenerse en cuenta no sólo para uso particular, sino que las instituciones y las organizaciones han de aplicarla para poder garantizar la efectividad y eficiencia de las medidas de seguridad, para prevenir daños ocasionados por su falta de aplicación o si el daño ya está ocasionado, almenos minimizar el impacto.

A continuación un vídeo en el que se explican aspectos fundamentales de la seguridad electrónica.

 


 

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